Hablar sobre un estudio de la universidad de Harvard que vincula el popular programa infantil británico "Peppa Pig" con el autismo se volvió viral, pero ni el estudio ni el científico que supuestamente lo publicó existen.
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| Los niños que miran por lo menos 30 minutos de "Peppa Pig" por día tienen un 56 por ciento más de probabilidad de desarrollar autismo. |
El 20 de octubre de 2016, el sitio web Morning News USA publicó una historia (ahora con una nota del editor de que las afirmaciones han sido desacreditadas) informando que un popular personaje de televisión infantil llamado Peppa Pig hizo que los niños desarrollaran autismo al inspirarlos a replicar su actitud irreverente hacia autoridad. Esta pieza transparente de clickbait, que fue recogida por varios otros sitios web y cuentas de redes sociales, citó un estudio de 2012 de la "Universidad de Harvard":
Los expertos afirmaron que Peppa sufre de complejo de superioridad, muestra un comportamiento inapropiado, es descortés, intolerante, irrespetuoso, envidioso, arrogante y orgulloso. ¡Estos no son los rasgos que los niños deberían emular!
Afirmaron que Peppa Pig está creando un comportamiento irrespetuoso entre los niños. Además, investigadores de la Universidad de Harvard publicaron el resultado de un experimento que realizaron en 2012. Dijo que mirar a Peppa Pig era una de las principales causas de autismo entre los niños.
Marc Wildemberg, un epidemiólogo que fue el investigador principal dijo: "los niños expuestos a por lo menos 30 minutos al día del programa tienen un 56% más de probabilidad de desarrollar autismo".
Fuera de las claras tergiversaciones tanto del autismo como de la ciencia, hay una serie de indicios igualmente obvios de que esta "investigación" está completamente fabricada.
Antes que nada, la "Universidad de Harvard" no es un lugar real (sin embargo, la Universidad de Harvard). En segundo lugar, la Universidad de Harvard no ha mencionado el estudio en ninguna de sus páginas web y una breve búsqueda de Google Scholar revela que esto se debe a que el estudio en sí no existe. En tercer lugar, Marc Wildemberg, que probablemente tampoco existe, nunca ha estado asociado con Harvard y no tiene presencia en la web para hablar.
La conexión entre el autismo y la televisión fue sugerida políticamente por un economista basado únicamente en las correlaciones entre la lluvia, las suscripciones de televisión por cable y las tasas de autismo en tres estados. El estudio , publicado como un documento de trabajo de la Oficina Nacional de Investigación Económica sin revisión por pares , ha sido ampliamente criticado :
[Autor principal] Los hallazgos del Prof. Waldman no hacen nada para explicar el mecanismo por el cual la televisión influiría en el autismo, una brecha que las variables instrumentales son inherentemente incapaces de llenar. Esa es una razón por la que muchos investigadores de autismo creen que no debería haber publicado sus resultados o hecho recomendaciones a los padres. "Creo que esto es irresponsable", dice [especialista en autismo] el Dr. Klin de Yale. "No deberíamos brindar asesoramiento clínico a menos que haya evidencia científica que lo justifique".
Además, la afirmación de que el autismo es una conducta aprendida no está arraigada en ninguna ciencia. Si bien se desconoce la causa, muchos científicos creen que es el resultado de una combinación de factores hereditarios y ambientales.
Finalmente, caracterizar el autismo como una conducta simplemente "grosera" ofensivamente sugiere que el comportamiento de una persona autista es necesariamente molesto e intencionalmente así. En realidad, el autismo se compone de un amplio espectro de condiciones relacionadas con la capacidad de un individuo para interactuar y comportarse socialmente. Según lo definido por el CDC:
El trastorno del espectro autista (TEA) es una discapacidad del desarrollo que puede ocasionar importantes problemas sociales, de comunicación y de comportamiento. A menudo no hay nada acerca de cómo las personas con TEA se diferencian de otras personas, pero las personas con TEA pueden comunicarse, interactuar, comportarse y aprender de maneras diferentes a las de la mayoría de las demás personas. Las habilidades de aprendizaje, pensamiento y resolución de problemas de las personas con TEA pueden ir desde los dotados hasta los severamente desafiados. Algunas personas con TEA necesitan mucha ayuda en sus vidas diarias; otros necesitan menos.
Sin embargo, esta pieza descarada de miedo a la pseudociencia viral no es el tipo de ayuda que las personas con TEA o sus padres y cuidadores necesitan.
Morning News USA ha emitido su propia (silenciada) duda sobre la historia, actualizando su publicación con la advertencia de que el epidemiólogo de la Universidad de Harvard Marc Wildemberg "no parece ser una persona creíble para afirmar que mirar a Peppa Pig puede llevar al autismo". ".
— Peppa Pig Official (@peppapig) 16 de agosto de 2016
Fuente: https://www.snopes.com/fact-check/peppa-pig-causes-autism/
